jueves, 25 de febrero de 2021

RETRATO DE UNA MUJER EN LLAMAS - PORTRAIT DE LA JEUNE FILLE EN FEU

 PROGRAMA 316 (05-02-2021)

 

SINOPSIS

 

Francia, 1770. Marianne, una pintora, recibe un encargo que consiste en realizar el retrato de bodas de Héloïse, una joven que acaba de dejar el convento y que tiene serias dudas respecto a su próximo matrimonio. Marianne tiene que retratarla sin su conocimiento, por lo que se dedica a investigarla a diario. (FILMAFFINITY)

 

EDITORIAL

 

"Si vas a intentarlo,
ve hasta el final.
De lo contrario no empieces siquiera.
Tal vez suponga perder novias,
esposas, familia, trabajos
y quizás hasta la cabeza.
Tal vez suponga no comer durante
tres o cuatro días,
tal vez suponga helarte
en el banco de un parque.
Tal vez suponga la cárcel, la humillación,
el desdén y el aislamiento.
El aislamiento es el premio.
Todo lo demás sólo sirve para poner
a prueba tu resistencia,
tus auténticas ganas de hacerlo.



Y lo harás.
A pesar del rechazo y
de las ínfimas probabilidades,
y será mejor que cualquier cosa
que pudieras imaginar.
Si vas a intentarlo,
ve hasta el final.
No existe una sensación igual.
Estarás sólo con los dioses
y las noches arderán en llamas.
Llevarás las riendas de la vida
hasta la risa perfecta,
es por lo único que vale
la pena luchar."

Charles Bukowski

 

Canción elegida para la editorial

 


IMPRESIONES SOBRE RETRATO DE UNA MUJER EN LLAMAS


 

En 1923 Car Jung escribe lo siguiente: La creación de algo nuevo no se realiza con el intelecto sino con el instinto de juego que actúa por necesidad interna. La mente creativa juega con el objeto que ama. El juego, es sin dudas el origen del arte. El artista juega con la técnica hasta apoderarse de ella. Juega con los límites y así da lugar a las vanguardias. Ama sin límites el objeto con el que juega, y la vanguardia aparece cuando el objeto amado, por fin se libera y deja así de ser un objeto. El artista juega con lo que lo rodea, con su cotidiano, con todo aquello que tiene a mano y de esa manera se libera él también de restricciones arbitrarias expandiendo así su campo de acción. Jugar rompe leyes, romper leyes enriquece nuestra posibilidad de respuesta y eso flexibiliza nuestra capacidad de adaptación en un mundo siempre cambiante. Jugar con los mismos ojos de cuando éramos chicos, jugar de verdad que no es otra cosa que jugar libremente. Jugar para que caigan al final estas paredes de cartón que maquillan la impuesta realidad en la que vivimos y aparezca así con su frescura aquella dama de velos floreados que es la sorpresa. Jugar seriamente con todos los sentidos para hacernos invisibles porque bien sabemos que para que el arte aparezca es el artista el que debe desaparecer definitivamente. Encuentra lo que amas y déjalo que te mate nos recomendó más de una vez el viejo Hank. 



Viene a mi mente, claro, aquel juego con las pinturas planteado en el film de Celine Sciamma titulado “Retrato de una mujer en llamas”. Veremos en aquel relato guionado también por la misma directora, como Marianne, la artista encargada de retratar a Eloísa quien deberá casarse forzada por su madre en pocos días, realiza un proceso profundo, difícil e intenso para lograr convertir el objeto en obra. La chica en arte. El cuerpo en deseo. Aquella mirada en amor ardiente. El film estará repleto de imagines muy significativas, de verdaderos cuadros que invitaran a realizar lecturas profundas propias del lenguaje audiovisual. Conmovedoras metáforas visuales. En el primer acto, momento destinado al trabajo de la presentación de los personajes y del conflicto dramático, uno de los planos describe perfectamente el desarrollo y la esencia que veremos en el personaje de Marianne. La protagonista es llevada por unos marinos en un bote hacia la costa. La embarcación está repleta con su equipaje y cajas donde guarda sus lienzos en blanco. Una de ellas cae al agua, Marianne no lo duda y salta del bote. El cuadro quedará en ella abrazada a la caja, flotando en un mar embravecido. 



Nos sabremos si es Marianne quien salvará a su arte o será el arte la que salve a Marianne. Será ella sola frente a la bravura de la época, frente a la monotonía azul del mar. Ella, una mujer sola, con todo el peso que aquello conlleva para esa sociedad, luchando contra la naturaleza, luchando contra lo impuesto, contra las olas que intentan hundirla y borrar para siempre todos sus colores. Un cuadro que también anticipara lo que vendrá de alguna manera. Un naufragio en el salvaje mar de las sensaciones. Este recurso será recurrente durante todo el film, veremos a Eloísa por lo general encuadrada junto a la feroz llama de algún fuego. La directora irá por más, y nos mostrará en algún momento a Eloísa en llamas realmente prescindiendo así de toda metáfora. El relato estará ambientado en Francia 1770 logrando una construcción de época bastante interesante. Ayudará a tal objetivo el excelente trabajo sobre el vestuario, el maquillaje y peinado. El guion estará resuelto en pocas locaciones, logrando centrar así la atención sobre la tensión dramática que las actuaciones mismas irán desarrollando con exquisito cuidado. La fotografía del film será otro de sus puntos fuertes. Se trabajara bastante el plano fijo buscando generar la ilusión del cuadro pictórico, de la pintura y el lienzo. 



Sciamma presentará también desde el guion ciertas referencias a la literatura de manera bastante evidentes. Anunciará la tragedia dándole el nombre al personaje co protagónico de Eloísa, refiriendo de esta forma a la intelectual de la literatura francesa del mismo nombre y su apasionada y controversial relación con Abelardo. Dara vueltas por allí también el mito de Orfeo y Eurídice cuya trama se mezclará con la planteada por la directora de manera tal que se resignificará una escena cerca del final donde Marianne se dará vuelta antes de tiempo para mirar a Eloísa tal vez con los mismos motivos que lo hiciera en su momento Orfeo. ¿Sera un final poético, será uno egoísta o quizás uno cobarde? nunca lo sabremos. Lo que si sabremos y nos quedará bien en claro es que aquella relación nació del fuego, aquel que purifica todo, aquel que como el juego, no tiene reglas ni imposiciones. Aquel que pase lo que pase, nunca será cenizas sino que seguirá ardiendo eternamente, como todo buen arte.

 

Lucas Itze.-

 

Canción post impresiones

 


UNIVERSO SCIAMMA

 


 

Céline Sciamma nació en Pontoise, Francia, el 12 de noviembre de 1978. Estudió guión en La Femis, una de las mejores escuelas superiores de imagen y sonido de París. Se graduó con el guión de Naissance des pieuvres (El nacimiento de los pulpos), que luego se convirtió en su primer largometraje, estrenado en 2007. La historias de tres amigas de 15 años que forman parte de un equipo de nado sincronizado y donde empezarán a desarrollarse y a encontrar el amor. El film fue un éxito en su país y la llevó a hacerse conocida. En 2010 narra el corto Pauline y la complicada vida en un pequeño pueblo por su condición de homosexual. Sigue con la misma temática en Tomboy, donde una niña de 10 años utiliza su corte de pelo para hacerse pasar por un varón y empezará a verse en situaciones comprometidas. 



Logró los premios a Mejor film en el Bafici y en diversos festivales como Gijón, Berlín, San Francisco o Dublín, entre otros. En 2014 dirigió Bande de Filles (Girlhood), la historia de una adolescente que sufre prohibiciones tanto en la familia como en su barrio, que conoce a un grupo de chicas de espíritu libre donde empezará a descubrir nuevos códigos. Logró el premio a mejor película independiente extranjera en Estados Unidos y Reino Unido. Con Retrato de una mujer en llamas, terminó de convertirse en una de las más prometedoras cineastas de su generación. Su próximo proyecto se llamaría Petite maman, y sería un drama sobre la infancia, protagonizado por dos niños de 8 años.

 

FICHA TÉCNICA

 

Título original: Portrait de la jeune fille en feu

Año: 2019

Duración: 120 min.

País: Francia

Dirección: Céline Sciamma

Guion: Céline Sciamma

Música: Para One, Arthur Simonini

Fotografía: Claire Mathon

Reparto: Noémie Merlant, Adèle Haenel, Luàna Bajrami, Valeria Golino, Christel Baras, Cécile Morel, Armande Boulanger, Michèle Clément

 

PELÍCULA COMPLETA

 

lunes, 15 de febrero de 2021

LANGOSTA - THE LOBSTER

PROGRAMA 315 (29-01-2021)

 

EDITORIAL

 

Clasificados. Años ´90. Hombre maduro busca señorita de 25 a 35 años para relación seria. Otra época. Mundo virtual, 2021: Steffy: Lo esencial es invisible a los ojos, seguime en el insta, busco charlar y si pegamos onda, conocernos. Redes sociales. El futuro ya llegó. Cambio de paradigma. Imagen y lo esencial tirado a la basura con una frase para figurar. La sociedad de la meritocracia impone modelos a seguir. A pesar de las luchas de los menos favorecidos, las redes sociales, las aplicaciones de citas y los estados de Whats App se llenan generalmente de cuerpos perfectos, mentes abiertas, frases de filósofos o escritores y la felicidad a toda hora del día. ¿Dónde se esconde la basura bajo la alfombra? ¿En qué habitación de este hotel al que llamamos vida tenemos que ir para mostrar lo que somos verdaderamente? 



¿Seremos nosotros tan ridículos como aquellos a quienes intentamos ridiculizar? Habrá que pensar en qué momentos nos volvimos tan básicos. En una entrevista a personas de talla baja, ellos comentaban que la gente los miraba de manera extraña cuando paseaban en pareja con alguien que no era de su estatura... ¿Porqué entonces esa manía de que ciertas personas solo pueden tener relaciones con un semejante? Separados, como si de razas de animales se tratase. El mundo cambia y nosotros seguimos buscando en la borra del café respuestas aún escondidas. Y así y todo buscamos amar y ser amados. Escapar del incompresible acoso de la soledad. Despertar un domingo entre abrazos que formen una sola persona. Salir de las tinieblas para andar sin buscarse pero sabiendo que era para encontrarse, como nos enseñó Julio. Para luego echarse a volar libremente, como una langosta.

                                                                                      

Marcelo De Nicola.-

 

Canción elegida para la editorial

 


IMPRESIONES SOBRE LANGOSTA


 

La dualidad. Siempre la dualidad participando en todo acto tranquilizador. Ante cualquier incertidumbre o situación donde podamos elegir múltiples opciones para salir, la decisión entre dos variables reduce la incomodidad de navegar sobre las imprecisiones de senderos alternativos. Lo binario parece haber tomado la posta y se ha convertido en regla normalizadora adaptada para regularlo todo en un mundo que día a día parece girar más veloz. Y no es ajeno a todo aquello el amor. Quizás uno de los conceptos más antiguos e indefinidos sobre el que nos seguimos preguntando. ¿Acaso puede caber la idea de amor en un reduccionismo tan estéril? ¿Acaso hay evidencia que compruebe la seriedad del relato de Aristófanes en el Banquete de Platón?  Recordemos que este personaje, ya con un nivel de alcohol en sangre bastante elevado, se pone de pie y comienza a relatar su teoría basada en la idea de un ser humano con ocho extremidades, cuatro manos y cuatro pies, y dos caras. Un ser viviente tan poderoso que provoca tal incomodidad en Zeus que decide separarlos para resguardarse de la potencial amenaza de estos seres que amenazan la hegemonía del Dios. Al dividirlos crea a los humanos pero con un profundo anhelo. Todos comenzarían a vagar por el mundo buscando aquella otra mitad que los completara y de esa manera quedaría explicada la idea del amor. Y acá estamos aún, conviviendo con aquella teoría que de alguna manera ocupó el protagonismo y regula el amor de esa manera. 



El amor como búsqueda de la plenitud. El amor regulado por un comediante griego hace más de 2300 años. Quizás sea este el hilo, el porqué y el cómo del relato que veremos en The Lobster o Langosta en su traducción del film del griego Yorgos Lanthimos donde explora aquella búsqueda sobre el amor en una producción catalogada como drama-comedia. Muchas veces seremos indiferentes a los encasillamientos de género de una película pero en este caso deberíamos prestar atención porque en ese lugar se sientan las bases para comprender la intención de la propuesta. La historia será lineal, y comenzará con una escena de impacto y misterio que a lo largo de la película ira tomando cada vez más sentido. Una voz en off presentará a nuestro protagonista, dará cierta información que nos ubicara en una realidad distópica que nos llevara automáticamente al Fahrenheit de Bradbury o Un mundo Feliz de Huxley. En aquel universo lo binario será explícito y estará aunado con el amor. Las personas serán obligadas a enamorarse y formar pareja y los factores que tendrán relevancia en éxito de aquella comunión serán las características superficiales de cada individuo, por lo que veremos al rengo buscar su complemento en una persona también renga, al miope con el miope, por lo que serán entonces las deficiencias físicas las que guíen y garanticen los vínculos afectivos. Los solteros tendrán 45 días en un hotel para lograr encontrar a su par o por lo contrario serán transformados en animales y expulsados al bosque y otra vez lo binario. 



La civilización o el bosque, humano o animal, cazar o ser cazado. Sin lugar para puntos intermedios los personajes que calcen 44 y medio deberán ponerse talle 44 o 45 y de esta manera irán desarrollando la idea de los extremos en donde por un lado, dentro del hotel serán obligados a formar pareja, y fuera de él, en el bosque tendrán totalmente prohibido generar vínculos afectivos. En la frialdad y la distancia propuesta en los planos podría estar representada la manera de ubicarse en lo que parece una crítica a la relación de las personas atravesadas por esta concepción del amor, la actuación robotizada de los personajes también reforzaran aquella idea y por el contrario también habrá cierta idea de resignificación donde el amor sería como una fuerza autónoma imposible de reglar, y que si de alguna manera se podría hacer visible como objeto de observación o si habría algún plano sobre el que se evidencia sería en el de la libertad. Allí donde las normas levantan muros, el amor ofrecerá fugas. Allí donde las leyes callan las voces el amor inventará idiomas. Allí donde se pinta el mundo de blanco y negro el amor saldrá a relucir su paleta de colores. Allí donde veremos dos personas oprimidas será la libertad lo que los enamorará y ese concepto será más amigo de esta casa. Allí donde solo hay oscuro egoísmo veremos en el horizonte asomar algo así como un amor amarillo.

 

Alan Beneitez.-

 

Canción post impresiones

 


UNIVERSO LANTHIMOS


 

Nacido en Atenas el 27 de mayo de 1973, llegó al mundo del cine desde los comerciales y la televisión, lugar donde empezó a hacer conocido a mediados de los ´90. Estudió dirección de cine y televisión en la Escuela de Cine de Atenas. Su punto de partida llegó en 2001 cuando filmó junto a su mentor Lakis Lazopoulos la comedia Mi mejor amigo. Un año después se larga en solitario con el corto Uranisco Disco y el segundo largo llegaría en 2005, sería Kinetta, donde en un pequeño y solitario pueblo griego se empiezan a cometer una serie de asesinatos. En 2009 se empieza a hacer famoso al dirigir Colmillo (Canino) donde logra una nominación al Oscar como mejor película de habla no inglesa, y el Premio “Una cierta mirada” en Cannes. 



Dos años después llega Alps, sobre un grupo de enfermeras que trabajan atendiendo las necesidades de las familias que han perdido a sus seres queridos y buscan reemplazar a estos a cambio de dinero. Volvió a estar en boca de todos los críticos en 2015 cuando lanzó ya con un reparto estelar (Colin Farrell, Rachel Weisz, Lea Seydoux, John C. Reilly) el film Langosta. Dos años después filma en Reino Unido El sacrificio del cuervo sagrado, un thriller psicológico familiar que se alza con el premio a guion en Cannes pero que las críticas, al igual que con Langosta, fueron positivas o negativas. En 2018 termina de confirmarse como uno de los cineastas más importantes de Europa gracias a La Favorita, con dos de sus actrices fetiche: Olivia Colman y Rachel Weisz, a y suma a Emma Stone. 10 nominaciones al Oscar (película, guion, dirección) entre las que estaban nominadas las 3 actrices. Colman se llevó todos los premios del año por su interpretación de la Reina Ana de Inglaterra, en un película basada en la guerra con Francia del siglo XVII. 



En 2019 realizó el cortometraje Nimic con Matt Dillon como protagonista, sobre un chelista profesional tiene un encuentro fortuito con una extraña en el metro que tiene consecuencias inesperadas en su vida. Con pocos films ha creado una interesante carrera donde hay algo clave: sus películas no dejan indiferente a nadie. Veremos que nos trae en este período pandémico.

 

FICHA TÉCNICA

 

Título original: The Lobster

Año: 2015

Duración: 118 min.

País: Grecia

Dirección: Yorgos Lanthimos

Guion: Efthymis Filippou, Yorgos Lanthimos

Música: Varios

Fotografía: Thimios Bakatatakis

Reparto: Colin Farrell, Rachel Weisz, Jessica Barden, Olivia Colman, Ashley Jensen, Ariane Labed, Angeliki Papoulia, John C. Reilly, Léa Seydoux, Michael Smiley, Ben Whishaw, Roger Ashton-Griffiths, Rosanna Hoult, Heidi Ellen Love

 

PELÍCULA COMPLETA

CRIATURA DE LA NOCHE - LAT DEN RATTE KOMMA IN

PROGRAMA 314 (22-01-2021)

 

SINOPSIS

 

Oskar, un tímido niño de doce años, que es acosado en el colegio por sus compañeros, se hace amigo de Eli, una misteriosa vecina de su edad, cuya llegada al barrio coincide con una serie de inexplicables muertes. A pesar de que Oskar sospecha que Eli es un vampiro, intenta que su amistad esté por encima de su miedo. (FILMAFFINITY)

 

EDITORIAL

 

Huir es vivir, quedarse es morir. El movimiento es posible gracias a la finitud del tiempo. Nos movemos por necesidad, nos movemos porque la única certeza que tenemos en la vida es ese punto final donde todo se acaba de una vez y para siempre. La muerte es tal vez la única verdad y el tiempo es quizás su truco más perfecto. De no sabernos finitos y envueltos en este cuerpo que nos traiciona a la vuelta de cualquier esquina, guiados absurdamente por unos sentidos banales y defectuosos, de tener la certeza que mañana habrá otro amanecer para nosotros, otro sol brillante donde calentarnos y así seguir proyectando bajo el sugerente título de mañana, de poseer certeza de todo aquello, de nada serviría la gracia elegante del movimiento. Desde la pétrea paciencia de lo eterno no habría ningún reto en soltar y dejar ir ya que descansaríamos en la certeza de que aun haciéndolo tendríamos el tiempo suficiente para esperar desde nuestro lugar que todo retorne a donde lo dejamos. Ser eterno es ir a menos. En la eternidad no hay riesgo, no hay aventura posible porque la apuesta es siempre mínima o tal vez inexistente. 



Huir es vivir, quedarse es morir. Tal vez la eternidad, la inmortalidad, fuera más seductora si uno no supiera jamás que posee tales cualidades. Entonces allí uno andaría corriendo por los bulevares oscuros de la nada con la tranquilizadora ilusión del movimiento desgranándose entre los ambiciosos pensamientos de una vida que se acaba. Huir rápido de uno mismo, porque uno es su propia muerte. Alejarse corriendo de aquel que fue hace a penas segundos porque lo estático, lo que no se mueve, ya es anécdota, ya es palabra que es otra de las tantas formas de la muerte. Huir hacia adelante, sin importar la dirección, escapar rápido del ahora, de lo establecido, de lo impuesto. Correr hasta entumecer todos nuestros músculos para crear nueva vida, nuevos puntos de vistas, nuevos sentidos, nuevos mundos y universos. Quedarse es morir, es ser narrado con tristeza por los ojos amarillentos del pasado. Correr es vivir, es gritar en la cara que otro orden siempre es posible.  

 

Lucas Itze.-

 

Canción elegida para la editorial


 

IMPRESIONES SOBRE CRIATURA DE LA NOCHE

 


¿Dónde quedó ese sueño que se transformó en pesadilla? ¿En qué copas cayeron esas espesas lágrimas de sangre que destrozaron la inocencia? Ese mundo de fantasía, de repente, desapareció por completo. Se entregaron al azar las palabras de un te quiero olvidado en una habitación oxidada. El sol nos obnubiló de repente y la frialdad de la noche escondió los más valiosos tesoros. Allí, en medio de la nieve eterna, gritamos mensajes nunca dichos y dejamos frases escondidas en algún árbol tallado. Quizás donde nuestras manos se rozaron por última vez estará la respuesta. Ahí, en la cobardía de los sueños empezamos a perder la batalla. En ese voraz y perpetuo intento de convertir esos sueños en realidad. Y quedará solo en eso. Intentos. Y el volver a empezar. Y nuestra sangre otra vez bombeando del corazón ante una cálida mirada. Y llegará el deseo de ser vampirizados en una noche lúgubre y ajena. Ajena a nosotros. Ajena a ellos. Quizás para ser salvados de una efímera y trágica vida. Esas vidas en las cuales los diferentes no tienen nada que perder. Ahí entonces aparecerá nuestro conde Drácula. También en esa misma tertulia jugará con nosotros otro conde, en este caso Orlock, de quien hablamos hace muy poco. Entre ellos, quizás aprendiendo un poco el oficio estará Eli. La bella Eli. Quizás esté acompañada de Oskar. Quizás no... Porque el futuro no lo escribimos nosotros. 



O quizás habría que preguntarle directamente a John Ajvide Lindqvist, escritor de la novela Criatura de la noche y guionista de la adaptación del film dirigido por Tomas Alfredson. La nieve. Siempre la nieve trae algo interesante. El blanco domina todo y cada aparición hace que resalte más. Y mientras lo blanco de la nieve se transforma en rojo sangre, es imposible no acordarse de Fargo, el film de los hermanos Coen. Aunque la trama será completamente diferente, no podemos dejar de relacionar ciertas imágenes. Lo mismo les habrá pasado a quienes vieron la reciente Pienso en el final de Charlie Kaufman. Pero volvamos al principio, siguiendo este inocente juego de palabras. La nieve cae y un fondo negro nos mantiene atentos. Lo mismo para el sonido del viento que suena con fuerza, mientras una voz over repite la frase Chilla como un cerdo. Se abrirá el telón y veremos unas casas, inmediatamente descubriremos a Oskar, el joven protagonista a través de las ventanas de su habitación, repitiendo la misma frase y con un cuchillo en la mano. En la segunda imagen veremos a alguien que cambiará la vida del pequeño pueblo, pero al igual que el director, lo iremos develando con el tiempo. Asistiremos a un guión lineal y a un film con muchos más silencios que diálogos en determinados momentos. A diferencia de otros films del estilo, acá se jugará con esos silencios para confirmar pensamientos, sobre todo en los encuentros entre los jóvenes protagonistas. 



No será así cuando veamos a los adultos, ellos tendrán mucho para decir pero poco para hacer. Sobresaldrá la técnica en los encuadres y en la forma de crear el campo visual, donde en la mayoría de los momentos donde aparece Eli no habrá profundidad de campo, haciendo foco en los protagonistas. Oskar en muchos casos aparecerá detrás de vidrios de ventanas o puertas, como si alguien estuviera observándolo. Sus interacciones con su madre siempre se darán desde diferentes puntos, con espejos o puertas de por medio, lo que marcará la distancia en la relación de ambos. La cámara jugará con ciertos planos detalle y habrá ciertos planos simétricos que homenajearán a Kubrick o Wes Anderson. La fotografía se servirá de colores pastel en casi todo su mobiliario y de colores fríos en las vestimentas para combinar con el blanco de la nieve. Esta estuvo a cargo del premiado suizo Hoyte Van Hoytema, en una de sus primeras incursiones, quien luego trabajaría con grandes nombre como Spike Jonze (Her), Christopher Nolan (Interstellar, Dunkirk, Tenet) o Sam Mendes (Spectre). La música pre-anunciará que hay que estar atentos en ciertos momentos, en algo bien típico del género y la banda sonora logrará adentrarnos en ese mundo helado, de ventiscas y pasos hundiéndose en la nieve. La historia será sencilla pero no por eso banal. Estamos en los años 80 y la frialdad nórdica chocará con la violencia física ejercida por los compañeros de clase de Oskar. Una madre ausente y un padre alcohólico serán el combo perfecto para crear un personaje retraído, que en su tiempo libre colecciona noticias de crímenes. 



Aparecerá entonces ella, Eli, como caída del cielo. Como si fuera un ángel que viene a ayudarlo desde el más allá. Será bella, inteligente y decidida. Ella como una diosa en un altar en su primer encuentro. Ella resolviendo el cubo mágico en minutos. Ella observándolo todo. Y de repente, la muerte. La sangre que estallará por todos lados y será su alimento. El pueblo empezará a sufrir acciones trágicas y ya nada será igual. Descubriremos en esa tierna Eli a una niña vampiro. Llorará después de terminar con su víctima y nos dejará con mil preguntas rondando en nuestra cabeza. Y llegará el amor. Oskar, como haría cualquiera de nosotros, se enamorará de su ángel. El tiene 12 años y estará en pleno cambio de niñez a adolescencia, con todo lo que eso conlleva. Ella tiene 12 años, pero vividos en tantos que ni recuerda. No sabemos como llegó ni quien la trajo. No sabemos si vive con el padre o es alguien que la encontró hace años. No nos importa. Porque lo que importa es el aquí y ahora. Y nada es tan efímero como el ahora. Y en ese mundo efímero es donde esas dos almas se encuentran y buscan salvarse cada uno a su modo. Con la sangre como protagonista. No vendremos a juzgar sus formas ni a festejar muertes ajenas. Solamente realzaremos el amor y la ilusión de dos desposeídos que sueñan con tenerse el uno al otro. Huir es la vida, quedarse es la muerte como frase que resume la historia. Y allá irán, alejándose de un lugar para volver a ser en otro lado, sabiéndose dos en uno, para dejarse entrar uno a otro en sus sueños y en sus vidas, como efecto de su influencia.

               

Marcelo De Nicola.-

 

Canción post impresiones

 


UNIVERSO ALFREDSON

 


 

Nacido el 1 de abril de 1965 en Lidingo, Suecia. Su padre, Hans (llamado Hasse), fue un actor, escritor, comediante y cineasta, que incluso trabajó con Ingmar Bergman en Vergüenza o con Jan Tröell en Los emigrantes. Desde chico el pequeño Tomas participaba en producciones de su padre, como por ejemplo en la serie cómica Hasseatage, que unía los nombres de su padre (Hasse) y de su compañero de elenco Tage Danielsson. Ya de grande, arrancó como asistente en la productora más importante del país para luego ser uno de los creadores del canal sueco TV4. Uno de sus éxitos fue la adaptación sueca del programa Fort Boyard. En 1995 dirige su largometraje Bert, basado en una novela juvenil y que lo llevó a ganar el premio a mejor director en Guldbagge. Más adelante se unió al grupo de comedia sueco Killinggänget como director en 1999. "Vi que eran un poco más divertidos que los demás, y un poco más completos", dijo. 



Su primera colaboración con el grupo fue una serie de 1999 de cuatro películas para televisión, incluido el falso documental Screwed in Tallinn, que muestra a un grupo de solteros suecos que viajan a Estonia en autobús con la esperanza de encontrar novias estonias. En 2003 filmó Konstortid, un film sobre oficinista que tienen que adaptarse a nuevos cambios y un año después llegó Four Shades of Brown, con el grupo de humoristas Killingganget. La comedia fue un éxito y logró el premio a mejor director (entre otros) en su país nuevamente. El 2008 adapta Criatura de la noche y se convierte en un éxito internacional. El film logró nominaciones en los premios del cine europeo, BAFTA, Goya, además de lograr el de mejor película en festivales como el de su país, el Nórdico, Saturn y Tribeca. Eso le abrió las puertas internacionales, y en 2011 eligió irse a Inglaterra para adaptar una novela del recientemente fallecido John Le Carré: Tinker Taylor Soldier Spy... a la que aquí se tituló El Topo y contó con una gran actuación de Gary Oldman en el papel de un espía durante la guerra fría. El film logró además de la nominación al Oscar para el querido Gary, otra por mejor guión adaptado. Mientras que logró el premio a mejor película británica en su país. 



En 2017 film nuevamente en el Reino Unido, The Snowman, basada en la novela de Jo Nesbø, sobre un asesino en serie, que no logra convencer a la crítica en general, a pesar de tener entre sus protagonistas a Michael Fassbender y Charlotte Gainsbourg. Para el 2020 tenía pensado filmar nuevamente en su país, una nueva película de la banda sueca Jönssonligan, una banda dedicada a los atracos y crímenes, un clásico del cine sueco que desde los 80 en adelante ha tenido una decena de films, pero la pandemia atrasó sus planes.

 

FICHA TÉCNICA

 

Título original: Låt den rätte komma in (Let the Right One In)

Año: 2008

Duración: 110 min.

País: Suecia

Dirección: Tomas Alfredson

Guion: John Ajvide Lindqvist (Novela: John Ajvide Lindqvist )

Música: Johan Söderqvist

Fotografía: Hoyte van Hoytema

Reparto: Kåre Hedebrant, Lina Leandersson, Per Ragnar, Henrik Dahl, Karin Bergquist, Peter Carlberg, Ika Nord, Mikael Rahm, Karl-Robert Lindgren, Anders T. Peedu

 

PELÍCULA COMPLETA

domingo, 14 de febrero de 2021

CON ÁNIMO DE AMAR - IN THE MOOD FOR LOVE

PROGRAMA 313 (15-01-2021)

 

SINOPSIS

 

Hong Kong, 1962. Chow, redactor jefe de un diario local, se muda con su mujer a un edificio habitado principalmente por residentes de Shanghai. Allí conoce a Li-zhen, una joven que acaba de instalarse en el mismo edificio con su esposo. Ella es secretaria de una empresa de exportación y su marido está continuamente de viaje de negocios. Como la mujer de Chow también está casi siempre fuera de casa, Li-zhen y Chow pasan cada vez más tiempo juntos y se hacen muy amigos. Un día, ambos descubrirán algo inesperado sobre sus respectivos cónyuges. (FILMAFFINITY)

 

EDITORIAL

 

Hoy regresé a mi viejo barrio para recordarte. Caminando por aquellas veredas donde tantas veces imagine un tal vez que nunca se materializó. Dibujé siluetas tuyas con mi sombra, sombra intocable, sombra que se transformaba cuando intentaba acercarme, que huía cada vez que daba un paso. Sombra misteriosa que pintaba tu pelo negro con el humo de mi cigarrillo. Sombra que se distraía y se ponía a jugar ser mi espejo de hoy ¡Maldita sombra que interpretó a la perfección tu papel! Hoy regresé a encontrar en aquellas huellas que dejamos y que aún siguen intactas, trocitos de posibilidades, intentos imaginarios de sinceramientos presos de absurda cobardía, fantasías que quedaron abrazadas a pedazos de mi inocencia y juventud, sensaciones de real satisfacción inmortalizadas en tus risas, aun sabiendo que el destino no tenía más que eso para nosotros.


Y entonces pensé que no teniendo nada, lo tenía todo y me pregunté cuando fue que me volví tan exigente y autoritario con mi felicidad. Si solo bastaba con quemar las horas buscando revelar el misterio que escondían ciertos gestos tuyos. La felicidad descansaba en pequeños actos desinteresados, en la búsqueda de metas inalcanzables, en besos imaginarios, en esos instantes que el viento se me aliaba acercándome tu perfume. Todo aquello que en principio parecía un homenaje a tu gracia mutó y entonces me di cuenta que no era a vos a quien buscaba sino a mí mismo. A mi yo de antaño que sin tanta tecnología sabía dónde encontrarte pero sobre todo, donde encontrarme. No teníamos nuestro Pont des Arts pero si aquella esquina, aquella magia y aquellos atados de 10 que quemábamos con la misma rapidez que se fueron esos atardeceres y que ardieron junto a la posibilidad de llegar a vos. Bebo el último sorbo de vino caliente sentado en el umbral de aquella puerta que es donde termina mi recorrido y donde te vi por última vez sin saberlo. Me despido de vos y de mí mismo con la esperanza de que este eco que aún resuena sobreviva y siga esperándome allí otros 20 años más o hasta que vuelva a perderme.

 

Alan Beneitez.-

 

Canción elegida para editorial

 


IMPRESIONES SOBRE CON ÁNIMO DE AMAR


Todo empezó sobre aquella mesa de madera perdida en el fondo del lugar, bajo la luz amarillenta, junto al humeante cenicero que como una locomotora infernal me conducía sin frenos a los arrabales más desiertos que la noche escondía. Esa noche de la cual hasta las estrellas habían huido también fue protagonista de aquel comienzo. Tan frágil, tan agobiante, tan lejana. La trama ve aquella seductora danza que dibuja el humo de mi cigarrillo y sale a su encuentro sin dudarlo. Siempre supe que hay algo de adolescente en el actuar de la trama. Ese amor que no presiente, ese fuego incontenible, indomable. Esa inocencia rebelde, ese desacato militante para con los horarios y las tradiciones. Uno termina cediendo ante sus caprichos, pero aun así buscamos tenderle trampas. Buscamos parecer mejores de lo que somos, solo para retenerla un rato más, un café más, un último renglón más. Hacemos talleres para seducirla, buscamos una vida de excesos, nos perfumamos de bohemia. Visitamos bares y hasta tiramos botellas al dormido mar de las nostalgias. Nos dejamos la barba y la vista perdida en cualquier lado. Pero la trama se va como los buenos amores, sin decir nada, sin últimas palabras, sin hasta luegos. El blanco devora toda forma como una fiera hambrienta. Ya no hay rectas, ya no hay colores. Los nombres buscan algún refugio allá lejos, muy cerca del olvido. Hace frío por acá. Ya no hay voces. No hay olores. Nadie dicta el texto. ¿Dónde está aquel jardín bañado de sol dorado? El conejo ya no viene y sin conejo no hay madriguera. ¿Cuál será mi abismo, si hasta el sol se ha olvidado de nosotros? Alejandra. ¿Por qué siempre Alejandra? Una muñeca vestida de princesa toma el té. Con sutileza de princesa y no de muñeca, bebe sin quemarse. Apoya una taza que ya no es de este mundo, sino de otro al que olvidaremos en el próximo sorbo. El ahora, aquel ápice vertiginoso. Borges. Siempre Borges.



En cada intento sus sombras aparecen a devorarlo todo. A exigir más de donde hay tan poco. El cuadro busca la altura de la muñeca princesa, todo es blanco y negro y el fondo se equilibra de manera exacta con su recorte. Exterior / atardecer en el acantilado / hora mágica. El sol cae lento por el fondo de la imagen. Vemos el moribundo recorrido del astro en su eterno tiempo real. El punto de vista no se moverá de ahí. La muñeca llora. La lágrima helada sobre el té. Bergman. Bergman y la muerte. Bergman y el blanco y negro. Siempre ellos dando forma, siempre ellos cuestionándolo todo. Allen, Von Trier, Cortázar, mi viejo. ¿Mi viejo? Si, el también y mi vieja con toda su poesía recitada, esa poesía que resuena como un río inalcanzable contando historias con su canto de rocas. Allí es donde está todo el tesoro, aquel tesoro que nunca se alcanza pero al que uno recurre como si las manos pudieran jugar con sus monedas doradas. Aquel tesoro que está pero no se toca. ¿Pero qué hacer con un tesoro que no se toca? Bueno, después de todo, un tesoro que no se toca no es otra cosa más que un recuerdo. Aventurarse al recuerdo por más que duela, volver a esas callecitas de la memoria donde todos éramos felices y todos estaban vivos. Algunos detractores querrán llevarse nuestra aventura y acercarán con sus frías manos la tentadora copa del olvido advirtiéndonos que nada de lo que uno recuerda es auténtico, que lo verdadero jamás puede ser parte de la memoria. Pero nosotros rechazaremos con cierto heroísmo aquel alivio canallesco que promete el olvido porque siempre supimos que no hay otro paraíso que el paraíso perdido. 


Esto puede parecer el final pero quizás no sea más que un intento. Tal vez es solo el comienzo. Este será el juego que nos propondrá nuestro buen amigo Wong Kar-Wai en la segunda parte de la trilogía sobre el amor llamada In The Mood For Love. Será Chow el encargado de padecer el doloroso conflicto que es siempre recordar. Intentará escribirlo todo, borrará y empezará de nuevo. Probará estilos intentando acercarse ya no a lo verdadero de una historia sino a aquel recuerdo inmanente de un amor idílico. El film estará construido con una estética exquisita. Podremos reconocer muchas influencias que ayudarán a organizar un todo diferente. Notaremos cierta narrativa Almodovariana que se repetirá en el armado de escenarios y elección de colores. Habrá cierta dramática que nos recordara la escritura de Allen. Notaremos cierto ritmo típico de Cortázar. Y los boleros sonaran para robarnos el alma, infernalmente, enfermizamente. La estructura narrativa del film no será lineal, la trama se perderá para luego volver diferente. Se crearán no espacios que serán sostenidos por la capacidad actoral de los intérpretes. Habrá escaleras que suban y bajen a la vez para llegar a habitación situadas en ninguna parte. Aunque el tono lo amerite, no estaremos dentro del terreno de lo surrealista. Asistiremos a una experiencia única de la narrativa y la memoria. La creación buscando derrotar al olvido. El arte, buscándole algún sentido a toda esta vida, a este manojo infernal de memoria que somos, a este cúmulo de ausencias infinitas, a este ser perdido entre la soledad de dos incógnitas. Este sí puede ser el final. Aunque tal vez sea solo el principio.

 

Lucas Itze.-

 

Canción post impresiones

 


UNIVERSO WONG KAR WAI

 


Nacido en China en 1958, emigró a Hong Kong a los 5 años de edad, por las dificultades para hablar el idioma cantones de su lugar adoptivo (él hablaba mandarín y dialectos de Shangai), iba con su madre al cine pasándose horas ahí dentro.

Empezó trabajando como guionista para la televisión, y después empezó una carrera junto a su amigo australiano Christopher Doyle, quien sería el director de fotografía de la mayoría de sus films, gracias a ese binomio, Kar Wai fue apodado “el poeta de la imagen”.

Su primer film fue en 1988, llamado El fluir de las lágrimas, donde la historia se centra en dos hermanos que están inmersos en el mundo de la mafia china.

Dos años después llegó Días salvajes, film con el que empezó a ser reconocido en diferentes partes del mundo.


En 1994 filma 
Ashes of Time, donde cuenta la historia de un armador de katanas en la antigua China, en un film de tono épico. El film ganó el premio a mejor fotografía en Venecia.

Ese mismo año llega uno de sus films más aclamados: Chungking Express, dos historias de amor en el pleno barrio turístico de Hong Kong. Un joven policía y una traficante de drogas por un lado. Un agente de policía y una camarera de un bar por el otro. Fue nominada a mejor película en varios festivales. Uno de los films preferidos de Quentin Tarantino.

Un año después filma la excelente Angeles caídos, un notable drama donde conviven un asesino a sueldo que quiere retirarse, una prostituta enamorada de el sin conocerlo, y un joven mudo que vive con su padre.

En 1997 estrena Felices juntos, la historia de Lai y Ho, dos jóvenes que vienen a Argentina en busca de una nueva vida, pero una vez en Buenos Aires, los caminos se separan, y Lai, que trabaja de portero de un bar, quiere volver a Hong Kong, cuando su antiguo amante Ho, aparece, la cosas ya no son iguales. El film ganó el premio al mejor director en Cannes.


El 2000 llega con una catarata de premios gracias al film Con ánimo de Amar, la historia de Chow, un redactor de un diario local que se muda a un edificio donde conocerá a Li Zhen, quien se acaba de ir a vivir con su esposo. Ellos se volverán cada vez más amigos, pero pronto descubrirán algo inesperado de sus respectivos cónyuges. Es la segunda parte de la trilogía iniciada en Días salvajes. El film consiguió el premio a mejor película extranjera en los Bafta ingleses, los César franceses, y en el Círculo de Críticos de Nueva York.

Participa del film Eros, una película dividida en tres episodios sobre el erotismo, la sensualidad y el amor. Junto a Steven Soderbergh y Michelangello Antonioni. Su segmento se tituló La Mano.

En 2004 cierra la trilogía iniciada en 1991 con el film 2046, sobre un escritor que escribía sobre el futuro, aunque en realidad estaba escribiendo sobre el pasado. Para muchos, la obra maestra del cineasta.



Llega a Hollywood en 2007 cuando estrena My Blueberry Nights, la historia de una jóven que realiza un viaje espiritual por América y a lo largo de la Ruta 66 se encontrará con diversos personajes. Nominada a la Palma de Oro en Cannes. El último largo que ha filmado fue El arte de la guerra en 2013, la historia de Ip Man, el mítico maestro de kung fu japonés (y maestro de Bruce Lee) y la bella Gong (la gran luchadora del país en ese momento) y su importancia en la civilización china, en la previa de la invasión japonesa de 1936.

En estos años está preparando Blossoms Shangai, una serie contada durante dos períodos: desde la década de 1960 hasta mediados de la década de 1970, el final de la Revolución Cultural; y desde la década de 1980 hasta principios del siglo XXI.
Sería una adaptación de la novela de Jin Yucheng que completaría una nueva trilogía junto a sus emblemáticos títulos ‘Deseando amar’ y ‘2046’.

 

FICHA TÉCNICA

 

Título original: Fa yeung nin wa (In the Mood for Love)

Año: 2000

Duración: 95 min.

País: Hong Kong

Dirección: Wong Kar-Wai

Guion: Wong Kar-Wai

Música: Michael Galasso

Fotografía: Christopher Doyle, Mark Lee

Reparto: Tony Leung Chiu-Wai, Maggie Cheung, Rebecca Pan, Siu Ping-Lam, Mama Hung, Chan Man-Lei, Koo Kam-Wah, Yu Hsien, Chow Po-Chun, Joe Cheung, Kelly Lai

 

PELÍCULA COMPLETA