martes, 28 de octubre de 2014

EL RESPLANDOR - THE SHINING



EDITORIAL

No sé si el hombre es social por naturaleza, sé que muchos tiemblan ante la soledad. Sé que el aislamiento, el encierro, quiebra hasta los espíritus más fuertes. Pero para esto debe haber una predisposición.
Hoy veremos a un hombre enloquecer, pero no de forma súbita. Toda su vida, toda una correlación de circunstancias lo empuja hasta ese momento de aceptación de una decisión que ya había sido tomada.
¿Por qué ser profesor? ¿Por qué casarse? ¿Cómo determinar con que mujer hacerlo? ¿Tener un hijo? ¿Por qué escribir? Y por último como culminación de una serie infinita de preguntas: ¿Qué escribir? ¿Tengo algo para decir?
Y si en ese mismo momento determinado, en esa justa pregunta, me doy cuenta de que la sociedad, empezando desde mi familia, me empuja a hacer todas esas cosas y además determina los gustos y los criterios por los cuales debo elegir? Entonces tengo algún contenido? mi respuesta sería no, al menos no propios, no auto determinados.


 "Todo trabajo y nada de ocio hace de mi un tipo aburrido"
Qué pregunta debe hacerse alguien que quiera saber si tiene dentro suyo algún contenido, alguna elección, la que sea, a través de los sentidos o el intelecto o, por qué no, la fe? Esa pregunta sería: ¿ Qué me gusta? ¿Eso que me gusta me causa verdadero placer?
Elecciones, elecciones, todo pasa por elegir. Ahí es donde puede que se manifieste la naturaleza humana, en su libertad aunque muchos digan que no existe. ¿Es el hombre un ser social por naturaleza? no lo sé, lo repito, por ahí no pasa la película. Si su elección es ser social entonces diría que sí, porque está en la naturaleza del hombre elegir.
La única posibilidad que queda es derribar barreras, desterrar a los carceleros y terminar con mis represores. Por ahí pasa la película. Jack termina de aceptar una vieja decisión en su vida, la única diría. También su obra maestra, algo que puede comunicarle a los demás... SU RESPLANDOR.

Christian Soria

Canción elegida para la editorial



Impresiones para “El Resplandor”


Me enfrento de cara a mi abismo. Hurgo entre mis dudas. Comparto mi mesa con mis miedos y bebo de su vino de lejanías y ausencias. Bajo a mis infiernos, aquellos solitarios y fríos infiernos, a aquellas tierras sin tu nombre, buscando, quizás, una mirada que me devuelva alguna imagen auténtica. He recorrido mis calles a plena luz del día, y en un descuido descubrí brillar en las sombras ciertas verdades. Cuando me faltaste, confirme cierto tu nombre. En tu ausencia, advertí lo doloroso que pueden ser un par de ojos negros. Quizás en la muerte para siempre seremos, cuando el polvo sea polvo, esa indescifrable raíz, de la cual para siempre crecerá, ecuánime o atroz, nuestro solitario cielo o infierno, nos advirtió Borges alguna vez. 


Camino, entonces, aquella oscuridad buscando lo ecuánime o lo atroz, aprendiendo de cada herida, hermanándome de alguna manera con todos mis fantasmas. Después de todo, crear tal vez sea también, morir un poco. El blanco de mi hoja, muere en el negro de estas palabras que escribo y en ellas, también se va algo mío. Dijo Nieztsche: “quien con monstruos lucha cuide de no convertirse a su vez en monstruo. Cuando miras largo tiempo a un abismo, el abismo también mira dentro tuyo”. Como no pensar aquí en Jack, aquel escritor sumergido en su acto creativo, aquel tipo transitando su abismo y sus miserias. En Jack veremos la sublimación del ser ante la obra. Veremos aquel terreno pantanoso y hostil que es de donde sale ese montón de espejitos de colores que es el arte. El Resplandor servirá como una gran metáfora de aquel viaje interno que exige cada material a su autor. El mundo de Jack olerá a sangre, a niñez solitaria, a ausencias y también a castración. Estructuralmente, el film comienza con el sinuoso recorrido en auto de nuestro protagonista por unas rutas montañosas. El paisaje se ira volviendo cada vez más árido y hostil en su recorrido. Así es como decide el genial Stanley Kubrick presentarnos a Jack. Lo hará desde el lugar de un personaje iniciando un viaje que comienza entre tupidos bosques verdes para terminar en el peor de los inviernos. Y lo que en un comienzo fueron solo curvas que doblaban el camino, terminara siendo el desesperado y caótico recorrido dentro de un laberinto imposible. El film trabajara aquel infierno con una fotografía muy precisa, cada plano y cada puesta, acompañara de manera extraordinaria la transición recorrida por el protagonista. La idea de viaje estará acentuada también desde cámara. Veremos gran cantidad de seguimientos en plano secuencia de personajes con el uso de Steadycam, herramienta que aportara fluidez al movimiento de cámara facilitando la realización del recorrido sin necesidad de cortes. 


Luis Alberto escribió en 1980, año en que se estrena El Resplandor, lo siguiente: Es inútil que pretendas brillar con tu historia personal. Un guerrero no detiene jamás su marcha. Quizás podamos entender a Jack como la imagen visible de aquella bella metáfora. Intentemos por un momento escapar a esa idea occidental de muerte y veamos en su oscuridad aprendida la cálida caricia de un poema concluido, la nota final de cualquier sinfonía. Tal vez entonces, cuando llegue el momento, podamos ver sus ojos con ojos más tranquilos, lejos del miedo y el espanto que supone lo finito. Entonces, quizás, en ese instante, podamos extenderle nuestras manos y darle gracias.

Lucas Itze.-

Canción post análisis


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FICHA TÉCNICA

Título original: The Shining
Año: 1980
Duración: 146 min.
País: Estados Unidos
Director: Stanley Kubrick
Guión: Stanley Kubrick & Diane Johnson (Novela: Stephen King)
Música: Rachel Elkind & Wendy Carlos
Fotografía: John Alcott
Reparto: Jack Nicholson, Shelley Duvall, Danny Lloyd, Scatman Crothers, Barry Nelson, Philip Stone, Joe Turkel, Lia Beldam, Billie Gibson, Barry Dennen, David Baxt, Manning Redwood, Lisa Burns, Louise Burns, Alison Coleridge, Norman Gay

Sinopsis


Jack Torrance se traslada con su mujer y su hijo de siete años al impresionante hotel Overlook, en Colorado, para encargarse del mantenimiento de las instalaciones durante la temporada invernal, época en la que permanece cerrado y aislado por la nieve. Su objetivo es encontrar paz y sosiego para escribir una novela. Sin embargo, poco después de su llegada al hotel, al mismo tiempo que Jack empieza a padecer inquietantes trastornos de personalidad, se suceden extraños y espeluznantes fenómenos paranormales.

TRAILER


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