SINOPSIS
En un futuro
cercano. El pueblo de Bacurau llora la muerte de su matriarca Carmelita, que
falleció a los 94 años. Algunos días más tarde, los habitantes se dan cuenta de
que el pueblo está siendo borrado del mapa... (FILMAFFINITY)
EDITORIAL
Al llegar al último habitante del pueblo este gritó “esta es mi tierra, la sangre de mis antepasados hicieron crecer los árboles que hoy están destruyendo. Y sobre mi sangre derramada nacerá un nuevo reino que clamará venganza. No es una amenaza, es un mensaje que les traigo del futuro”. Segundos después, se disparó en la sien mientras los nuevos reyes del pueblo reían cobardemente. A su paso, habían arrasado con todo lo que encontraron en el camino. Hombres, mujeres, niños, ancianos y hasta algún animal insolente. El polvo se empezó a asentar para dejar atrás parte de la historia y queriendo esconder el futuro. El poder y la violencia eran la combinación perfecta para destruir lo poco que había en pie. Cientos de años desperdigados entre los pastizales. Venían por todo... los campos que producían alimentos para la región, las carreteras que comunicaban poblados vecinos, las voces que visibilizaban ciertas miserias todavía incrustadas en la sociedad y el agua... si... el agua como el último bastión pre colonialista.
Lo que antes fue tierra, luego fue oro, y más adelante en el
tiempo fue petróleo. Ahora era el turno del agua. En ella vivía la última
esperanza. Todo sucedió muy rápido. Los nuevos reyes se instalaron con sus
propias leyes. La expansión había comenzado y parecía no haber forma de
pararla. Los poblados vecinos huían antes de que la muerte los encuentre. Pero
de repente, la voz del viejo sabio pareció escapar de su laberinto. Primero fue
el viento el que sopló con tanta furia que derribó viejas y nuevas
instalaciones. Luego el fuego ardió y consumió lo poco que quedaba mientras los
reyes ya no reían, y solo imploraban por auxilio. Finalmente el agua, esa que
tanto deseaban, llegó para arrasar con todo y ahogar esas bocas ya muertas de
infamia. La venganza se había consumado. Los dioses furiosos decidieron hacer
justicia por mano propia. Y así la gente empezó a volver marcando con sangre
cada paso, sabiéndose más fuertes y jurándose que unidos, nadie los podría
destruir...
Marcelo De
Nicola.-
Canción elegida
para la editorial
IMPRESIONES SOBRE BACURAU
Volvamos nuevamente a Eduardo Galeano si es que alguna vez fuimos capaces de irnos, si es que alguien vuelve a algún lado. El poeta escribió lo siguiente: Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, puede cambiar el mundo. Agregó también aquello que el alimento de las minorías se convierte en el hambre de las mayorías. La historia de Latinoamérica es la historia de su saqueo, de su avasallamiento cultural, de la sádica matanza de su gente. La historia de Latinoamérica es la historia de la fe justificando genocidios, torturando cuerpos para liberar almas, ejerciendo la autoridad de la palabra sobre todo aquello que se ignora o simplemente no se comprende. La resistencia entonces toma forma y sentido ante semejante panorama. Decir que se peleó por la libertad seria generalizar tanto que se correría el tonto peligro de tropezar con lo incorrecto. Lo inexacto y lo general suelen parecerse a menudo al abismal vacío que es la nada misma. Se peleó por la vida. La vida propia y la de los hijos. Se peleó para que el autoritarismo no lo devorara todo. Para romper con aquella dinámica que el finado Hegel explicara tan bien al describir la relación entre el amo y el esclavo. Se peleó por la defensa tan elemental del propio deseo. Por la construcción propia del ser en el devenir mismo del ser siendo. Y también claro por la libertad, pero ¿cuál libertad? Aquella libertad que existe como profundo anhelo en el interior de todo ser humano.
Bacurau, aquel profundo film de nuestro amigo Kleber Mendonça Filho, podría entenderse como un gran ensayo sobre la historia de esta lucha. El film, tal como sentará las bases el cinema novo (aquella corriente de fines de los 50 influenciada por el neorrealismo italiano y la nouvelle vague) mostrará la cruda realidad de un pequeño pueblo rural, una especie de macondo brasilero, tan insignificante para la otredad, para el forastero, que nadie puede encontrarlo en ningún mapa satelital. Como la belleza de cualquier detalle, a Bacurau hay que mirarla de cerca. La cinta poseerá una de las mejores fotografías que el cine brasilero tal vez haya dado nunca. Los filtros sobre la imagen harán pico en las tonalidades verdes lo que resaltará de manera muy particular los paisajes y construirá una gama del rojo por demás atrayente. El relato estará armado mediante convenciones que no responderán a un único género, lo que aportará indiscutidamente a su complejidad y belleza. Por momentos la cinta coqueteará con el western y se buscará narrar desde el plano americano, desde el detalle de un arma. En otros la película girará en torno al thriller y veremos al pueblo organizado utilizando su inteligencia, notaremos como la acción y el ritmo narrativo se aceleran.
Habrá algo también del cine
negro en la construcción y presentación de algunos de sus personajes. La
estructura narrativa será lineal y se trabajará sobre un conflicto externo
perfectamente dosificado. Este irá creciendo en la medida justa generando el
suspenso que el drama precisa para su correcto desarrollo. Las actuaciones serán
de una calidad exquisita salvo la interpretada por Sonia Braga que lograra superar aquel punto. Las particularidades
ofrecidas por el escenario del pueblo lograran de este espacio escénico la
construcción propia de otro personaje dentro del desarrollo dramático. Tal como
dicta la tridimensionalidad en la construcción misma de los caracteres Bacurau tendrá su historia, sus
características distintivas. Tendrá aquello dicho
pero también aquello silenciado. La
sutil belleza de lo sugerido. El pueblo mismo hablará de la libertad levantando
en su danza la polvareda salvaje propia del malón embravecido, escondiendo en
las entrañas mismas del silencio a varias voces la más letales y terribles de
todas las trampas.
Lucas Itze.-
Canción post
impresiones
UNIVERSO MENDONÇA FILHO
Nació el 3 de
noviembre de 1968 en Recife, Brasil. Se graduó de Licenciado en periodismo por
Su último film es Bacurau de la que declaró “Nos
dimos cuenta que a ese encuentro entre el rico y el pobre, llegaban muchas
películas que miraban a las comunidades del interior de Brasil con
condescendencia, como si fueran insectos o animales de estudio, Así es como
decidimos hacer una película que al mismo tiempo fuera un homenaje al cine de
género que nos gusta desde siempre. Es una especie de safari de cinefilia y por
eso está rodada en Panavision, el clásico sistema de pantalla ancha patentado
en Estados Unidos. En Aquarius hay citas al cine de Brian de Palma y Paul
Verhoeven, que quizás no son tan exuberantes como las de Bacurau que se
relacionan con John Carpenter y Sergio Leone.”
FICHA TÉCNICA
Título original:
Bacurau
Año: 2019
Duración: 132
min.
País: Brasil
Dirección: Kleber
Mendonça Filho, Juliano Dornelles
Guion: Kleber
Mendonça Filho, Juliano Dornelles
Música: Mateus
Alves, Tomaz Alves de Souza
Fotografía: Pedro
Sotero
Reparto: Udo
Kier, Sônia Braga, Jonny Mars, Chris Doubek, Karine Teles, Alli Willow, Brian
Townes, Antonio Saboia, Barbara Colen, Julia Marie Peterson, Silvero Pereira,
Edilson Silva, Thomas Aquino, Valmir do Côco, Buda Lira, Rodger Rogério, Uirá
dos Reis, Clebia Sousa, Rubens Santos, Carlos Francisco Galán
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