martes, 2 de agosto de 2016

THE FORBIDDEN ROOM

PROGRAMA 148 (15-07-2016)

EDITORIAL

Lo palpable lo mórbido
el conco fondo ardido los tanturbios
las tensas sondas hondas los reflujos las ondas de la carne
y sus pistilos núbiles contráctiles
y sus anexos nidos
los languiformes férvidos subsobornos innúmeros del tacto
su mosto azul desnudo
cada veta
cada vena del sueño del eco de la sangre
las somnilocuas noches del alto croar celeste que nos animabisman el soliloquio vértigo
cuanto adhiere sin costas al fluir el pulso al rojo cosmogozo
y sus vaciados rostros
y sus cauces
hasta morder la tierra
lo ignoto noto combo el ver del ser lo ososo los impactos del pasmo de más cuerda
cualquier estar en llaga
los dones dados donde se internieblan las órbitas los sorbos de la euforia
cualquier velar velado con atento esqueleto que se piensa
la estéril lela estela
el microazar del germen del móvil del encuentro


los entonces ya prófugos
la busca en sí gratuita
los mititos
hasta ingerir la tierra
todo modo poroso
el pozo lato solo del foso inmerso adentro
la sed de sed sectaria los finitos abrazos
toda boca
lo tanto
el amor terco a todo
el amormor pleamante en colmo brote totem de amor de amor
la lacra
amor gorgóneo médium olavecabracobra deliquio erecto entero
que ulululululula y arpeialibaraña el ego soplo centro
hasta exhalar la tierra
con sus astroides trinos sus especies y multillamas lenguas y excrecreencias
sus buzos lazo lares de complejos incestos entre huesos corrientes sin desagües
sus convecinos muertos de memoria
su luz de mies desnuda
sus axilas de siesta
y su giro hondo lodo no menos menos que otros afines cogirantes
hasta el destete enteco
hasta el destente neutro
hasta morirla

Oliverio Girondo


IMPRESIONES PARA THE FORBIDDEN ROOM


Aquello que está realmente vivo es ininteligible a nuestros sentidos. Y hablo de los sentidos como aquel resabio domesticado de lo que alguna vez fueron estos ojos guiados por un verdadero instinto. Aquello vivo y absolutamente inestable, aquello profundamente individual, escapa heroicamente nuestra razón. Sobre las ideas muertas, lo categorizado y conceptualizado trabajará la ciencia y será también sobre aquella muerte que se desarrollará la inteligencia humana, ya que lo vivo corre como el río, sonoro e inalcanzable. Estamos frente a un film indiscutiblemente vivo, claramente irracional, fragmentado como el recuerdo, oscuro como toda pesadilla. The Forbidden Room de Guy Maddin y Evan Johnson será un relato complejo, un tenebroso laberinto que se deberá transitar con el morboso placer de entregarse al juego sin caer jamás en la desesperante sensación de saberse perdido. 


Decía un gran amigo de esta casa, el señor Robert Bresson, que él prefería que las personas sientan la película a que la entiendan. Allí quizás la esencia del hecho artístico, Lord Byron nos grita desde el fondo que el arte es causar efecto no importa cómo. Aparecerá como resultado, entonces, la conmoción, el movimiento puro y efectivo. El film abrirá instalando el caos desde sus placas de inicio, tanto en lo visual como en lo sonoro. Luego aparecerá aquella cita bíblica que rezará lo siguiente: cuando se hubieron saciado, dijo a sus discípulos: Recoged los pedazos que sobraron, para que no se pierda nada. Sobre esta idea se planteará la estructura narrativa y estética de la película. Asistiremos a la ilación de incongruentes situaciones que disgregaran en otros raccontos armando de esta manera, las crueles paredes del laberinto. Reconoceremos ciertamente por los caminos transitados fuertes influencias del cine Lynchiano, tanto en la energía trabajada actoralmente como también en el sonido y la iluminación. 


Habrá también cierta estética y hasta citas puntuales al expresionismo alemán que las encontraremos en la construcción de algunos delos tantos personajes o mismo en la elaboración de ciertos escenarios y vestuarios. Veremos cierta tendencia al arte abstracto, muy similar a lo trabajado por Bill Morrison en varios de sus cortometrajes. Se respirará cierto aroma a Warhol, hablo no de su fotografía sino de su cinematografía. Se trabajará la idea de la asfixia de forma tal que construirá una columna vertebral sobre la que se instalará el desarrollo del relato. Vendrán a apoyar esta idea la utilización de planos cerrados, la tiniebla sobre la que se montará cada escena, la colorimetría que jugará con nuestra percepción como también lo hará la banda musical del film, cargando de drama cada instante, cada cuadro. Llegaremos al final del laberinto, confundidos, profundamente aturdidos por la extraordinaria experiencia de habernos perdidos en la incongruencia de un suelo que creíamos firme. Fundirá todo a negro, menos aquella extraña sensación de habernos sentido vivos.-

Lucas Itze.-

Canción post impresiones


UNIVERSO MADDIN


Nacido en la ciudad de Winnipeg, su educación cinematográfica se inició y consolidó al margen de cualquier escuela, rodando breves piezas con amigos los fines de semana.
Su primera película, The dead father, es un cortometraje de 26 minutos realizado en 1986 con una cámara Bolex de 16mm. Pese a ser un trabajo primerizo muestra ya algunas de las constantes de su cine: ironía y humor tamizando una historia trágica, mezcolanza de géneros y experimentación formal.
Dos años después llegaría su primer largometraje, Tales from the Gimli Hospital, rodada con un presupuesto de tan sólo 20000 dólares y que alcanzó cierta notoriedad al ser rechazada por el Festival de Toronto. Narra el desarrollo de una epidemia en el pueblo de Gimli a principios del siglo XX y en ella se pueden encontrar referencias y homenajes que van desde las vanguardias francesas al expresionismo alemán pasando por directores tótem de la época muda como Fritz Lang o David Wark Griffith.
Posteriormente, Maddin ha rodado más de 30 películas entre cortometrajes y largometrajes, pasando poco a poco del más oscuro underground al estreno y celebración de sus películas en algunos de los más importantes festivales de cine del mundo.
Algunos de esos largometrajes son Careful de 1992; Dracula: Pages From a Virgin's Diary de 2002, que ganó el Festival de Cine de Sitges y que convirtió a su autor en un director bastante particular, en 2003 filma The Saddest Music in the World sobre un concurso en el que tienen que tocar la música más triste del mundo, que ha obtenido muy buenas críticas.
Los últimos dos grandes trabajos fueron Brand Upon the Brain! y el documental surrealista My Winnipeg, basado en su ciudad natal.

FICHA TECNICA

Título original: The Forbidden Room
Año: 2015
Duración: 130 min.
País: Canadá
Director: Guy Maddin, Evan Johnson
Guión: Guy Maddin, Evan Johnson, Robert Kotyk
Música: Galen Johnson, Guy Maddin, Jason Staczek
Fotografía: Benjamin Kasulke, Stephanie Anne Weber Biron
Reparto: Roy Dupuis, Clara Furey, Louis Negin, Mathieu Amalric, Paul Ahmarani, Geraldine Chaplin, Udo Kier, Sophie Desmarais, Charlotte Rampling, Karine Vanasse, Jacques Nolot, Amira Casar, Carolina Dhavernas, Gregory Hlady, Noel Burton, Slimane Dazi, Maria de Medeiros.

SINOPSIS


El film sigue a una tripulación de un submarino, un grupo de bandidos del bosque, un cirujano famoso y un batallón de niños soldados que reciben más de lo que esperaban. Todos siguen su camino hacia las ideas progresistas sobre la vida y el amor del que se ven rodeados.

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